Mi experiencia en el tema y aficionado al ciclismo (carretera y monte).
Uno de esos compré yo, Nyc, pero de los buenos, un Thule (creo recordar). Lo regalé.
Lo llevaba en un León. Cada vez que lo instalaba, tenía que poner unos adhesivos en el paragolpes. El coche era negro y me gustaba tenerlo impoluto. Los adhesivos tenían la función de proteger dicho paragolpes, por la sencilla razón de que, cuando pones las bicicletas, siempre se mueve. Y no hablemos de las cinchas. Se desajustaban cada dos por tres, teniendo que parar cada X kilómetros para ajustarlas. Y evidentemente, mirar y remirar por el retrovisor interior para asegurarme de que no perdía nada.
Cambié de coche: Mitsubishi Outlander. Le puse enganche: lo mejor que pude hacer. Ahí ya... las bicis, en su portabicis, iban de maravilla. Y si no, al tener espacio, quitaba la rueda delantera y de pie, podía meter hasta 3, con los asientos traseros hacia delante, evidentemente.
Vuelvo a cambiar de coche (M3x) y en el conce me regalan las barras portaequipajes para no tener que ponerle enganche y romper su estética (si es que hubiera que cortar el paragolpes, etc., que por lo visto, y después de preguntar recientemente, no es necesario).
Compré unos Thule para llevar dos bicis sin desmontar nada y quitarme de problemas (y aparte de gastarme una pasta, claro: ya que me habían regalado las barras portaequipajes...). Ahí cometí el error: JORGITO: ENGANCHE, por Dios, ENGANCHE !!!!
Lo dicho: si puedes, ponle un enganche y cómprate un portabicis. Es lo mejor que puedes hacer.
A parte de llevar tus bicis, te sirve para arrastrar un carro y hacer compras en IKEA (por ejemplo).
Ahora, vuelvo a plantearme lo del enganche, de verdad, constantemente.